De bicicletas a aviones


“Presuroso volaría a mi refugio, para librarme del viento borrascoso y de la tempestad” (Salmo 55:8)

Orville Wright (1871-1948) y Wilbur Wright (1867-1912)

Hay personas que difícilmente podrán entender el impacto de sus vidas, sólo las generaciones posteriores, pueden gozar del privilegio de conocer lo que esas vidas han significado para los demás. Los hermanos Wright se han ganado un lugar de privilegio en la historia de la aviación porque no sólo se interesaron por el vuelo, innovaron e inventaron, adelantando mucho los mecanismos que permitió el desarrollo posterior de la aviación.

Orville era deportista, había destacado en las carreras de bicicletas, así que no se les ocurrió mejor idea que montar un taller de reparación de bicicletas. Sin embargo, los apasionaba la posibilidad de volar. Conocían los esfuerzos del inventor alemán Otto Lilienthal (1848-1896), quien había muerto en un accidente mientras hacia un vuelo en planeadorcerca de Berlín. Lilienthal había establecido los principios fundamentales del vuelo planeado. Además se habían familiarizado con los estudios del ingeniero y arquitecto estadounidense S. P. Langley (1834-1906), quien desarrolló diversos principios de la aerodinámica y explicó el proceso por el cual el aire puede sustentar las alas.

Con la información que tenían se pusieron a construir cometas y planeadores biplanos, que perfeccionaron gracias a la introducción de elementos como el timón vertical, el elevador horizontal y los alerones. Con estas mejoras lograron controlar completamente el movimiento del aeroplano. 1903 fue un año clave porque pusieron un motor de combustión en un aeroplano. Por primera vez lograron que se elevara algo más pesado que el aire. Con eso marcaron el inicio de la aviación.

Dios le ha dado inteligencia al ser humano y la capacidad de inventiva. Es un error creer, como algunos del tiempo de los hermanos Wright, que era una equivocación crear algo para volar porque Dios no nos había hecho para eso. Muchos oscurantistas vieron con malos ojos el invento de los hermanos Wright y anunciaron las peores calamidades, pero esa actitud, que lamentablemente nunca se acabará, es simplemente, fruto de la ignorancia y de tomar la Biblia de una manera impropia, suponiendo que Dios hizo a un ser humano estático, cuando en realidad Dios creó a seres humanos capaces de solucionar problemas y de crear.

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
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Soñar


“La ciudad no necesita ni sol ni luna que la alumbren, porque la gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lumbrera” (Apocalipsis 21:23) 

Julia Tuttle DeForest  (1849- 1898)

Todo gran sueño comienza con una persona, alguien que ve lo que otros no ven y lucha para lograrlo. Las generaciones que vienen suelen olvidar el precio que otros tuvieron que pagar para concretar sus sueños.

Julia Tuttle vivió en una época donde se esperaba que las mujeres se quedaran en casa y se dedicaran al cuidado de niños. Nadie imaginaba a una mujer en otra cosa. Julia se negó a vivir ese estereotipo. Hija de un empresario de barcos, recibió de regalo en 1875 un terreno de 16 hectáreas donde se habían plantado naranjales, en Biscayne Bay región del sur de la Florida, cuando visitó el lugar con su esposo se enamoró de esa zona.

Su esposo murió en 1886 dejándola con una fundición de hierro y su padre falleció en 1891 heredando las tierras que poseía en Florida. Ella vendió la fundición y compró una extensión de 259 hectareas. Comenzó a soñar con construir una ciudad en ese lugar, pero tenía que convencer a un empresario que llevara el tren hasta donde ella quería. Intentó convencer a Henry Flager para ampliar su ferrocarril hasta el lado del río Miami y hasta la bahía de Byscaine. Le ofreció pagarle con parte de sus propiedades. Le escribió numerosas veces, incluso viajó para verlo, pero él se negó a aceptar la oferta. Sin embargo, entre 1894 y 1895 sucedieron las peores heladas en el sur de EE.UU. y fortunas completas se perdieron de la noche a la mañana al morir las cosechas y bosques enteros ser devastados por el fenómeno climático. Flager quiso saber qué pasaba con las tierras de Florida y supo que allí no había ocurrido nada, incluso Julia cuando supo de su interés le envió un ramo de flores y follaje para probarle que allí todo era bueno.

El resto es historia Julia es llamada la “madre de Miami”, tuvo un sueño, luchó por él y hoy en lo que eran sus tierras, existe una metrópoli moderna que ella alguna vez visualizó en sus sueños.Toda empresa necesita soñadores. Sin gente como Julia no existirían las grandes obras que hoy tenemos. Pero soñar implica también trabajar, de otro modo no se logra nada.

Jesús soñó con nosotros, nos vió en su imaginación, espero que alguna vez miles le siguieran y aceptaran su oferta. Ahora, nos está esperando en la ciudad que construyó especialmente para albergarnos, su sueño no estará completo hasta que tú y yo habitemos en ese lugar.

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Una carrera sin discriminaciones


“Todos los deportistas se entrenan con mucha disciplina. Ellos lo hacen para obtener un premio que se echa a perder; nosotros, en cambio, por uno que dura para siempre” (1 Corintios 9:25 ) 

James Cleveland “Jesse” Owens (1913- 1980)

Jesse Owens participó en los Juegos Olímpicos de Berlín, Alemania, en 1936, donde consiguió fama internacional al lograr cuatro medallas de oro: 100 y 200 metros planos, salto largo y como participante del equipo ganador en la carrera de relevos 4 x 100 metros. Fue el atleta más exitoso de los juegos olímpicos del verano de 1936. Tiempo después se instituyó el premio Jesse Owens para conmemorar su hazaña.

Owens era el nieto de un esclavo e hijo de un granjero. Mientras estudiaba arreglaba zapatos en las tardes, y luego de esa actividad iba a entrenar. En 1933 comenzó a destacar como un atleta nacional. Al salir de la secundaria muchas universidades querían ficharlo, finalmente acepta ir a la Universidad Estatal de Ohio luego de asegurarse que le dieran trabajo a su padre, de esa forma veló por la seguridad económica de su familia.

Su prueba de fuego la vivió al viajar a la Alemania de Adolf Hitler para participar en los juegos olímpicos. Hitler pretendía usar los juegos como un medio propagandístico para probar la supremacía de la raza aria. Sin embargo, Owens hecha por tierra esas esperanzas al conseguir cuatro medallas de oro, hazaña que se mantuvo hasta el año 1984 cuando otro atleta igualó su record.

Fue aclamado por todo el mundo, sin embargo al regresar a su país natal, tuvo que vivir el desprecio de quienes veían en los negros a seres inferiores. Al llegar a Nueva York la bolsa detuvo su trabajo en su honor, luego volvió a su labor de botones en el hotel Waldorf-Astoria. Más tarde contaría: “Cuando volví a mi país natal, después de todas las historias sobre Hitler, no pude viajar en la parte delantera del autobús. Volví a la puerta de atrás. No podía vivir donde quería. No fui invitado a estrechar la mano de Hitler, pero tampoco fui invitado a la Casa Blanca a dar la mano al Presidente”.

El racismo y la discriminación no tiene nada que ver con el mensaje de Jesús quién demostró fehacientemente que “Dios no hace acepción de personas” (Lucas 10:21). El mensaje de Cristo es aceptar, integrar e incluir. Es el único concepto posible para alguien que ama al Señor. ¿Estás dispuesto a seguir el ejemplo integrador e inclusivo de Jesús?

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El precio del saber


“Donde abunda sabiduría, abundan penas, quien acumula ciencia, acumula dolor” (Eclesiastés 1:18) 

Marie Salomea Sklodowska (1867-1934)

Al leer el nombre del personaje de hoy, probablemente, la mayoría de las personas no tendría ni idea de quién se trata, pero si se escribe “Madame Curie”, sin duda la mayor parte de la gente educada sabrá de quién se trata. Ella, es reconocida por el apellido de su esposo y no por sí misma, aunque tuvo mucho más éxito que su marido y logró en ciencia, lo que difícilmente, alguna mujer ha podido emular luego de ella.

Marie Salomea Sklodowska, la única mujer en obtener dos premios Nóbel en ciencias. En 1903 el de Física, por sus descubrimientos en relación a la radiación. En ese año fue la primera mujer galardonada con un Nóbel. En 1910 el Nóbel de Química, por descubrir dos elementos químicos, el Radio y el Polonio (a este último le dio ese nombre en recuerdo de su natal Polonia).

En 1893 obtuvo una licenciatura en Física y en 1894 se licencia en Matemáticas, dos áreas que hasta ese momento eran vedadas para las mujeres. En 1895, junto a su esposo que era profesor de física de la Universidad de la Sorbona, descubrió los rayos X y en 1896 la radiactividad natural. Marie hizo su tesis doctoral sobre este último descubrimiento. Ella fue la segunda mujer en el mundo en obtener un doctorado en ciencia.

Su esposo murió de manera trágica en 1906. A Marie se le ofreció una pensión vitalicia, pero ella la rechazó, en cambio solicitó hacerse cargo de la cátedra de su esposo, así que el 15 de noviembre de 1906 asumió como la primera mujer en enseñar en la Universidad de la Sorbona, en sus 600 años de fundación. Murió de leucemia, probablemente, por su exposición a la radioactividad, por sus estudios en ese campo.

Cuando escucho que las mujeres están muy limitadas, lo acepto, pero miro a Marie Salomea Sklodowska y pienso que es posible que las mujeres den la pelea para que las cosas sean diferentes. Marie lo consiguió en una época donde las mujeres carecían de derechos. Dios no hace discriminación de sexos ni de razas, no hay meta que una mujer no pueda lograr, Dios no nos ha creado para dejarnos invalidar por mitos sociales.

Si eres varón, ¿estás tratando a las mujeres con dignidad? Si eres mujer, ¿entiendes que Dios no hace acepción de personas y puedes lograr lo que quieras?

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Luz al final del túnel


“El débil renace a la esperanza” (Job 5:16) 

Annelies Marie Frank (1929-1945)

El Diario de Ana Frank es un libro intimista, honesto, ingenuo, esperanzador, escrito desde la perspectiva de quien está en pleno crecimiento y que pasó escondida en un refugio secreto por casi dos años y medio.

El diario parece escrito por un adulto, cuesta creer que su protagonista tenga 15 años, sin embargo, en ocasiones el verse sumido en situaciones extremas, hace que muchos niños y jóvenes de pronto se ven obligados a madurar dada las circunstancias que les toca vivir. Es lo que ella intuye cuando escribe “tuve la suerte de ser arrojada bruscamente a la realidad”.

En el diario Ana vuelca sus esperanzas y su visión de mundo de un conflicto que no logra entender, tal como son las guerras, no entendibles por nadie. Por eso tal vez despierta tanta reacción. El libro ha sido llevado al cine, se han escrito cientos de páginas sobre el mismo y se han hecho musicales para contar la historia.

Ana Frank se ha convertido con el tiempo en un símbolo de la voz de quienes son perseguidos y maltratados por cuestiones de discriminación y política racista. La profundidad del libro contrastra con la edad de la autora, sin embargo, es explicable a la luz de los acontecimientos, donde a menudo las personas perseguidas logran pensar más allá de las circunstancias que les toca vivir y hacen análisis que sólo llegan con la experiencia y los años. El 4 de abril de 1944 escribió en su diario: “Quiero que algo de mí perdure después de la muerte”, y lo ha logrado, con creces.

Un informante anónimo finalmente señaló el lugar donde estaba ella con su familia y otras personas escondida, y fueron llevados a un campo de concentración. Sólo sobrevivió su padre Otto Frank, quien finalmente logró la publicación del diario. Una frase de Ana puede describir la razón del impacto de este libro: “No veo la miseria que hay, sino la belleza que aún queda”. Ella eligió tener esperanza, antes que amargura.

Una religión sana, otorga lo mismo, paz y no miseria. Otorga esperanza y no amargura. Provee una mirada positiva aún cuando lo que se vea sea sólo oscuridad. Es como la religión de la Biblia, muestra la luz al final del túnel.

¿Qué tipo de mirada tienes frente a la realidad? ¿Qué lección de vida te entrega esta niña? ¿Cómo puedes hacer de la religión algo positivo y no negativo?

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Ver lo que otros no ven


“Escribe en un libro lo que ves” (Apocalipsis 1:11)

László József Biró (1899-1985)

Laszló nació en Hungría y vivió buena parte de su vida en Argentina. Fue periodista, pero no se lo conoce por eso, sino por los inventos que realizó. Patentó 32 inventos, pero es reconocido a nivel mundial por uno: El bolígrafo. Un pequeño aparato que es usado diariamente por millones de personas en todo el mundo.

Los inventores se diferencian de las personas comunes porque ven lo que otros no ven y trabajan para solucionar problemas que la mayoría de las personas pasa por alto. Antes del invento del bolígrafo se escribía con tinta utilizando plumas de ave o estiletes. Sin embargo, era una tarea delicada y muchas veces incómodas. En primer lugar, porque se solía desparramar gotas de tinta que dejaban huellas y suciedad. Por otro lado, en muchas ocasiones los recipientes de tinta se volcaban sobre mesas provocando un verdadero desastre. Laszló Biró se propuso buscar una mejor solución.

Viajó a Argentina, cuando comenzó la segunda guerra mundial, junto a su hermano Georg, escapando de la persecusión nazi que se había desatado en contra de las personas judías, raza a la cual él pertenecía.

Su hermano Georg que era químico logró una tinta lo suficientemente líquida como para usar en un bolígrafo y que secara rápido. Ladislao, como se hizo llamar en Argentina, tuvo la genialidad de poner al final de un tubo con una pequeña punta una bolita que permitía que la tinta fluyera sin desparramarse, de allí que su invento se lo llama boligrafo (bola para escribir). Formó una compañía que llamó Birome para hacer en serie su invento, por esa razón hasta hoy en Argentina se llama al bolígrafo: Birome.

En 1943 vendió su invento a la fábrica Faber de EE.UU. en una cifra astronómica y a la empresa Bic de Francia. El 29 de septiembre, día de su nacimiento, se conmemora el Día del inventor.

Los grandes hombres dejan huellas, así como Jesús que en silencio produjo una revolución. Las personas cargadas con un sueño no cejan y siguen, aunque otros intenten desanimarlos. A Jesús hasta sus hermanos y madre quisieron hacerlo desistir.

¿Qué sueño tienes? ¿Estás dispuesto a trabajar por lo que crees? ¿Estás haciendo el esfuerzo suficiente?

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Vivir bajo la conciencia


“Por precio fuisteis comprados; no os hagáis esclavos de los hombres” (1 Corintios 7:23)

Martin Luther King (1929-1968)

He intentando ponerme en el lugar de una persona que esclaviza y humilla a otra, he leído algunas de las declaraciones escritas por quienes creen honestamente en la superioridad de una raza sobre otra, pero, por más que lo pienso, no logro entender tanta ceguera. Lo más sorprendente para mí es saber que algunos de ellos han sido y son, miembros de iglesias cristianas.

En la mayoría de las sociedades modernas la esclavitud esté eliminada, pero, aún persisten personas que suelen tratar a algunos grupos étnicos como si fueran inferiores. Aún recuerdo con horror que viviendo en Perú observaba a las nanas o nodrizas, que tenían que andar uniformadas todo el tiempo, para que la gente supiera que no podían tratarla como a una igual, sino como una empleada al servicio de otras personas. Ni aún a la playa podían ir con otra ropa que no fuera esa y no se les permitía bañarse junto a los niños que cuidaban. Lo mismo, con matices en visto en otros países.

Martin Luther King, obtuvo un doctorado en teología y podría haber vivido tranquilamente en el norte de EE.UU. de donde procedía, ocupando un puesto académico o pastoral, sin hacerse problemas. Pero, decidió irse a vivir al sur, donde muchos de sus hermanos sufrían discriminación y acoso, sólo por ser de raza negra. La esclavitud fue abolida, pero muchos años después aún luchaban por no ser discriminados ni tratados como seres de segunda categoría.

Martin Luther King recibió el premio Nobel de la Paz, por su lucha para la defensa de los derechos fundamentales y civiles, que estaban siendo violados en su país, en abierta oposición a la ley. Sus esfuerzos rindieron fruto, pero fue asesinado por alguien que vió en él una amenaza.

Siempre ha sido así, el fanatismo no soporta la verdad. Cristo fue asesinado por hablar de libertad en un contexto donde eso no era aceptable. Jesús fue perseguido por enseñar que Dios era amor, en un momento, cuando la divinidad era asociada al terror y el miedo. Se ensañaron con Jesús por su trabajo con los desposeidos, los religiosos de su tiempo no soportaban ver a un pobre junto a ellos. Así ha sido siempre, la religión desequilibrada produce asesinos.

¿Cómo tratas a tus semejantes? ¿Haces distinción de personas y discriminas a otros? ¿Conoces el mensaje inclusivo de Jesús?

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Predicador de la paz


“Y el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz” (Santiago 3:18) 

Mohandas Karamchand Gandhi (1869- 1948)

Mohandas Karamchand Gandhi, más conocido como Mahatma Gandhi, es una de las figuras más emblemáticas y señeras del siglo XX. No sólo logró una hazaña pocas veces vista en la humanidad, sino que dejó una estela de coherencia que difícilmente algún otro ser humano ha igualado.

Alguna vez este abogado de la India escribió: “Yo sería cristiano, sino fuera por los mismos cristianos”. Con esta frase implacable dejó en evidencia algo que lo perturbó hasta el día de su muerte: La relación entre coherencia y vida. Teoría y práctica, que no siempre van de la mano. Fue un profundo admirador de Jesús, pero se sintió chasqueado por los cristianos que conoció que no vivían a la altura de lo que proclamaban. Alguna de sus desilusiones más profundas vinieron de profesos cristianos que tenían conductas totalmente contrarias a las enseñanzas de Jesús, pero que aún así se denominaban a sí mismos cristianos.

Gandhi, decidió aplicar el Sermón del Monte, tal vez el resumen más importante de las enseñanzas de Jesús, a rajatabla. Quiso vivir su mensaje al pie de la letra. Su enseñanza de la resistencia pacífica viene directamente de su comprensión de las doctrinas de Cristo, que entre otras cosas, enseñaba a no usar la violencia como forma de acción.

Procedía de una familia acomodada, su padre había sido gobernador de Porbandar, la provincia de la que procedía. Sin embargo, contrario a lo que se esperaba de un abogado en su país, se volcó a una lucha considerada perdida y que de un modo u otro significaba abandonar la vida de comodidad que había vivido.

Inició la lucha por hacer que la India se convirtiera en un país soberano y dejara de ser colonia inglesa. Lo hizo de la manera en que entendía, con resistencia pacífica. Emulando a Jesús que realizó una revolución sin violentar a nadie. Estuvo en la cárcel, fue azotado, maltratado y finalmente fue asesinado por las ideas que había defendido.

Tal como en el caso de Jesús, las personas que deciden vivir de manera coherente corren mucho riesgo, en cierto modo, es mejor el anonimato o el perfil bajo, pero Cristo tal como Gandhi vivió en base a conciencia.

¿Estás viviendo de manera coherente? ¿Refleja tu vida lo que crees?

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Vivir lo políticamente correcto


“Dame, pues, un corazón atento para gobernar a tu pueblo y para distinguir entre lo bueno y lo malo; porque ¿quién hay capaz de gobernar a este pueblo tuyo tan numeroso?” (1 Reyes 3:9)


Abraham Lincoln (1809-1865)

Cuesta creer que hubo épocas donde profesos cristianos, que se consideraban a sí mismos, personas piadosas y honestas, consideraran que la esclavitud era un expreso deseo de Dios.

Muchos de los más acérrimos defensores de la esclavitud y de todos sus excesos y crueldades, eran cristianos que asistían regularmente a la iglesia y que criaban a sus hijos en la piedad cristiana, pero era una “piedad” de formas y exclusivismo, que olvidaba lo más elemental del evangelio, ese que dice que Dios no hace acepción de personas y que Jesús murió por todos, sin distinción de raza, sexo o nacionalidad.

Abraham Lincoln es una figura extraordinaria, porque lideró un proceso muy doloroso, pero a la vez exitoso. Logró que se le diera a los esclavos el estatus de personas libres.

La tarea no fue fácil. Lincoln se ganó enemigos acérrimos por su lucha. Muchos lo vieron como el ícono de su esperanza pero otros lo transformaron en el causante de un desmedro económico, quitar el estilo de vida del sur de los EE.UU., centrado en la explotación de esclavos. De hecho, defendió la paz y la inclusión de todos, pero fue asesinado por alguien que veía en sus propuestas una amenaza para sus intereses.

Es una constante histórica que muchos personajes que han defendido la paz, la igualdad, la inclusión de todos, la no separación por raza o sexo, han terminado asesinados por los mismos esbirros de siempre, aquellos que no pueden soportar a un mensajero que trae esperanza millones de desplazados. Cuando Cristo caminó por las tierras de Palestina fue visto como una amenaza para el status quo de la época. Se constituyó en un revolucionario para el sistema. La política de los amantes del poder es siempre la misma, eliminar y sacar del medio a quienes atentan contra sus intereses. Jesús fue atacado no por sus ideas, necesariamente, sino por el peligro que representaban dichas ideas para el poder. Siempre ha sido así. Jesús es el mayor ejemplo de liberación de toda la historia, si viviera hoy, también tratarían de asesinarlo.

¿Estás siguiendo el ejemplo de Jesús de vivir de tal modo que le des esperanza a quienes viven esclavizados y claman por libertad?

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El grito de los pobres


“Pues él no desprecia ni pasa por alto el sufrimiento de los pobres, ni se esconde de ellos. ¡Él los oye cuando le piden ayuda! “ (Salmo 22:24)

Francisco de Asis (1182-1226)

Muchas personas, incluyendo a profesos cristianos, asumen que los pobres lo son por decisión personal y que no hay nada que hacer, más que darles limosna de vez en cuando. Este pensamiento, erróneo y oportunista, adquiere un tono más cruel cuando es proferido por personas que dicen adorar a Dios.

Francisco de Asis vivió en una época donde se consideraba que la pobreza era un “don de Dios” y que había que aceptarla sin decir nada, incluso, con una actitud de agradecimiento. Este pensamiento macabro y siniestro era fomentado, especialmente por el clero, que veía con malo ojos cualquier desvío de recursos para ayudar a los más necesitados. Lastimosamente, aún hay personas que se dicen cristianas que tienen un pensamiento similar, y tal como Judas exclaman con hipocrecía: “–¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios, para ayudar a los pobres?” (Juan 12:5), sin importarle en realidad los pobres, como dice Juan, sino queriendo agregar más dinero a su bolsa de ladrón.

Francisco no nació pobre, era hijo de uno de los más acaudalados comerciantes de su ciudad, sin embargo, entendió que si no vivía la pobreza de los pobres, no podría predicarles la sencillez del evangelio.

Rechazó especialmente la opulencia en la que vivía el clero, comparado con los más pobres de la sociedad.

En un gesto que no fue entendido ni siquiera por su propia familia, se fue a vivir entre los leprosos, los más rechazados de su tiempo. Su propio padre, creyéndolo loco, lo encerró en un calabozo. Fue librado por su madre y siguió su misión. Años después inició un proceso de evangelización entre musulmanes. Murió a los 44 años, pero su legado, aún permanece.

Personas como Francisco de Asis intentaron vivir el evangelio siguiendo el ejemplo de Cristo, de sencillez y sin opulencia. Cuando el cristianismo se cubre de poder y lujo, se da un pésimo testimonio de la vida de Jesús, quien nos invitó a vivir con sencillez y no discriminar a nadie.

¿Sigues el ejemplo de Jesús o usas la religión como medio de riqueza?

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Libres de elegir


“Cristo nos liberó para que seamos libres. Por lo tanto manteneos firmes en esa libertad y no os sometáis otra vez al yugo de la esclavitud” (Gálatas 5:1)
 Florence von Sass (1841-1926)

En ocasiones la historia es injusta. Tal es el caso de Florence von Sass, más comúnmente conocida como Florence Baker, por su esposo, el legendario explorador Samuel Baker. Sin embargo, ella tuvo vida propia y debería ser recordada por lo que fue, una mujer excepcional y para la época que le tocó vivir, definitivamente una heroína que merece ser recordada. Su vida fue reconocida recién hace pocos años al descubrirse en Inglaterra un diario de vida donde ella había recopilado los datos de sus aventuras.

Florence nació en Hungría. Su vida parece sacada de una novela. A los 17 años estaba en una feria de esclavos a punto de ser vendida en una subasta en Vidin, Bulgaria, cuando el escocés Samuel Baker, viudo y millorario la vio y la compró, para liberarla de su destino en un harem turco. Ella había sido secuestrada y vendida a un traficante de esclavos armenio. Luego de que Baker la compró, entre ellos nació una historia de amor digna de una película y juntos viajaron por África causando revuelo en la estricta sociedad victoriana llena de puritanismo, en que les tocó vivir.

Juntos iniciaron un viaje que pretendía descubrir el lugar del nacimiento del Nilo Blanco. A su paso, los indígenas solían quedarse atónitos porque nunca habían visto a una mujer blanca.

El 14 de marzo de 1864 llegaron al lago que buscaban y que Baker bautizó con el nombre del Alberto, en honor al difunto esposo de la Reina Victoria de Inglaterra. A partir de ese momento Florence fue bautizada como “la dama del Nilo”, porque junto a su esposo exploraron el río. De hecho fue la primera mujer en acompañar a un explorador.

Se dedicó el resto de su vida a luchar en contra de la esclavitud. De hecho participó en una expedición con su marido para erradicar la esclavitud de África. Sólo el que ha sido esclavo puede apreciar de verdad la libertad. Jesús dice que nos ha liberado, y por él podemos gozar del privilegio de ser llamados libres. El problema es que algunos no entienden aún el honor que han recibido de ser liberados por el propio Dios de los cielos.

¿Entiendes qué significa la libertad en Cristo? ¿Sabes qué precio ha tenido tu libertad?

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Nada encubierto


“Porque no hay nada encubierto que no llegue a revelarse, ni nada escondido que no llegue a conocerse” (Mateo 10:26)
Los siete de Auschwitz, 1944

Los esbirros del horror siempre obran del modo que lo hacen porque llegan a creer que sus crímentes quedarán escondidos por la historia, sin embargo, vez tras vez nos sorprendemos como de una u otra forma, la historia se encarga de sacar a luz lo que algunos han ocultado con tanto esmero.

65 años después del final de la Segunda Guerra Mundial, en uno de los antiguos muros de Auschwitz, se descubrió un mensaje de siete presos del campo de concentración nazi en el interior de una botella. El mensaje dice:

“Campo de concentración de Auschwitz, 20-09-1944, búnker antiaéreo. Estos presos lo han construido: Nº 121.313 Jankowiak Bronislaw de Posen, 130.208 Dubla Stanislaw de Laskowice, 131.491 Jasik Jan de Radom, 145.664 Sobczak Waclaw de Konin, 151.090 Czekalski Karol de Lodz, 157.582 Bialobrzeski Waldemar de Ostroleka, 12.063 Veissid Albert de Lyon (Francia). Todos de edades entre 18 y 20 años”

La cuadrilla compuesta por un grupo de cristianos condenados por sus creencias y por el desprecio que sentían hacia los actos de los nazis ha salido a la luz mientras una cuadrilla de obreros reformaban una escuela en Oswiecim, una localidad al sur de Polonia.

Según se menciona en un comunicado del Museo de Auschwitz, los autores de la nota “eran jóvenes e intentaban dejar tras ellos alguna pista de su existencia”. Seis de los prisioneros eran cristianos polacos, y uno de ellos era un deportado hebreo francés, quienes dejaron su huella en un pedazo de papel arrancado a una bolsa de cemento.

No es posible esconder el horror. Siempre sale a la luz por más esfuerzos que hagan los victimarios en esconder sus crímenes. El enemigo de Dios no tiene el poder de ocultar su estela de horror. Esos jóvenes que murieron por su fe, figurarán sin duda en los anales de los hechos de los cristianos que fueron capaces de seguir siendo fieles a Dios pese al horror.

Ser cristiano en épocas de paz, no cuesta mucho. El verdadero desafío es seguir siendo creyente cuando la fe es puesta a prueba por el horror.

¿Serías capaz de ser fiel a tu fe aún a riesgo de tu vida? Muchos han ofrendado su vida por su fe, ¿serías capaz de ser uno de ellos?

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No hay empresa sin esfuerzo


“El perezoso ambiciona, y nada consigue; el diligente ve cumplidos sus deseos” (Proverbios 13:4)
Samuel Moore Walton (1918-1992)

El esfuerzo siempre da resultados. No se construyen palacios de la nada. Muchos creen o asumen que el éxito viene por casualidad, craso error, en toda empresa, siempre hay sacrificios, tenacidad, sueños y trabajo, no se consigue nada que valga la pena de otra manera.

Probablemente muchos no conozcan el nombre Sam Walton, pero si conocen una de las cadenas de supermercados más importantes del mundo Wal-Mart, que es una combinación del nombre Walton con Market, y que fundó en un pequeño pueblo de los Estados Unidos.

Le tocó vivir la Gran Depresión que afectó a su país. Tuvo que hacer muchas cosas para ayudar en las finanzas familiares. Le correspondía ordeñar las vacas que tenía su familia, y posteriormente embotellaba lo que sobraba para venderlo y distribuirlo entre otras familias. En la tarde repartía periódicos y vendía suscripciones para revistas. No se quedó, como otros, esperando que llegara una oportunidad, salió a trabajar.

Estudio economía en la Universidad de Missouri y mientras lo hacía, trabajó como mesero a cambio de comida. Durante la segunda guerra mundial, sirvió en el ejército como no combatiente, supervisó la seguridad de plantas de aviones y campamentos de prisioneros. Llegó a ser capitán.

Luego de la guerra, con un préstamo de su suegro y el dinero que había ahorrado, abrió una tienda para vender todo tipo de mercadería. Se preocupó de tener muchos productos a bajo precio, se aseguró de cerrar más tarde que otros negocios y fue pionero en rebajar precios, al comprar mercadería directamente a los productores. El resto es historia, Wal-Mart se convirtió en la cadena de tiendas más grande de EE.UU.

El trabajo arduo siempre rinde frutos, por más que algunos no lo entiendan. Pocos entienden que lo mismo hizo Jesús. No nació en cuna de oro, ni recibió todo como un obsequio de ricos. Ganó, paso a paso, su lugar en este mundo, junto a los pecadores. Trabajó arduamente, como niño y joven, hasta convertirse en nuestro Salvador.

¿Estás trabajando arduamente para conseguir tus sueños? ¿Valoras lo que hizo Jesús por ti y por mi?

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Abrir caminos



“Has hecho fácil mi camino, y mis pies no han resbalado” (2 Samuel 22:37 )

Eloísa Díaz Insunza (1866-1950)

Hay héroes anónimos que difícilmente reciben algún reconocimiento, se quedan allí en la oscuridad de la historia, pero el efecto de sus vidas perdura aún cuando no los consideremos y los olvidemos.

Muchas mujeres hoy acceden a estudios universitarios, en algunas carreras, hay más mujeres que varones, pero, no siempre fue así, hubo algún momento en la historia, no muy lejana, donde se consideró que una mujer no podría ir a una universidad porque eso “afectaría su personalidad” o “no estaban preparadas para recibir tanta educación”, evidentemente, discriminándolas de una manera burda y denigrante. Por eso que Eloísa Díaz Insunza es una heroína, porque luchó denodadamente para ser aceptada en una facultad de medicina, en una época donde ninguna mujer estudiaba Medicina, tarea reservada exclusivamente para varones.

El año 1880, con gran oposición de mucha gente que veía su gesto como un acto de rebeldía no digno de una mujer, postuló a la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile, luego de ser aprobado un decreto que permitía, por primera vez, el ingreso de mujeres a dicha universidad. En 1887 se convirtió en la primera mujer en Chile y América del Sur en obtener el título de Médico Cirujano. Un hito, que no alcanzamos a dimensionar en toda su magnitud en la actualidad.

Fue sometida a más presiones que sus compañeros. Muchos de los docentes no veían con buenos ojos el tener a una mujer en una facultad de Medicina, pero ella luchó más, y obtuvo calificaciones que dejaron callados a los críticos que no aceptaban su presencia en la Universidad.

Al egresar desarrolló una destacada carrera profesional. Fue nombrada Inspector médico escolar de Santiago. Posteriormente fue directora del Servicio Médico Escolar de Chile, cargo en el que fomentó el desayuno escolar obligatorio, la vacunación masiva y su lucha en contra del alcoholismo.

Los luchadores, abren camino donde no hay. Son los que preparan el sendero para los que vendrán. Son los que no se conforman con la medianía.

Así fue Jesús, nunca se conformó, hizo más de lo que se esperaba de él. Ganó espacios para que tú y yo tengamos esperanza.

¿Estás reconociendo a quienes te facilitaron el camino que hoy transitas?

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
Del libro inédito: Héroes de verdad

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Pasión por la vida


“El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene la vida” (1 Juan 5:12)

Alexander Fleming (1881-1955)

Probablemente no lo sabes, pero le debes la vida a alguien, de quien tal vez no has escuchado nunca. Un científico que descubrió el primer antibiótico del que se tenga noticia y que ha salvado miles de vidas, nos referimos a la penicilina.

Fleming, quien nació en Escocia, trabajó como médico microbiólogo en el Hospital St Mary de Londres, Inglaterra. Durante la primera guerra mundial trabajó como médico en el frente y quedó impresionado por la gran cantidad de muertes ocasionadas por metralla contaminada. Al regresar de la guerra se concentró en intentar encontrar algún anticéptico que sirviera para detener las infecciones de las heridas y salvar vidas.

Finalmente descubrió un hongo, identificado como Penicillium notatum que era capaz de atacar las bacterias y eliminarlas. Fleming decidió no patentar su medicamento porque creía que de esa forma sería más fácil la distribución del antibiótico. Gracias a sus estudios y específicamente, al descubrimiento de las características de la Penicilina, recibió el Premio Nóbel de Medicina en 1945.

La penicilina, significó un gran aporte para la medicina moderna, iniciando un proceso que llevó a otros investigadores a desarrollar otros antibióticos.

Probablemente, la mayor parte de los seres humanos le debemos la vida a Fleming. Personalmente, tuve un accidente a los 14 años, y luego de haber sido operado cinco veces, tuve una grave infección que me tuvo entre la vida y la muerte, y fui salvado por la Penicilina, así que soy uno de los que está en deuda con este investigador.

La vida es frágil, lo extraordinario de este hombre fue su pasión por la vida, lo que lo llevó a encontrar un remedio para la infección y la muerte. Lo mismo que ha hecho Dios mediante Jesús. Proveerle al ser humano un remedio para que no sea destruido por la infección del pecado y no sea destruido por la muerte. Jesús es nuestra medicina, el que nos muestra un camino que lleva a la vida eterna. Sin Jesús no tendríamos esperanza.

¿Entiendes lo que Cristo ha hecho por cada uno de nosotros?
Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
Del libro inédito: Héroes de verdad
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Aprender a amar



“El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor” (1 Juan 4:8)

Leo Buscaglia (1924-1998)

Hay ideas que de tanto ser repetidas, parecen verdad, pero un concepto por más que se lo repita no se convierte en verdad. A amar se aprende, aunque muchos puedan decir que simplemente es algo natural. Muchas acciones que realizamos los seres humanos, aún cuando son naturales, necesitan un proceso de aprendizaje.

Leo Buscaglia, fue profesor de educación especial en la Universidad del Sur de California. Haciendo clases un día se dio cuenta que una de sus alumnas no aparecía en el aula. Siempre la veía en el mismo asiento, como distante y en silencio. Preguntó por ella, y de pronto, un mutismo pesado calló entre sus alumnos y uno de ellos compungido le contó que ella se había suicidado. Eso provocó un quiebre emocional en Leo que comenzó a preguntarse cómo era posible haber estado tan cerca de ella, y así haberla desconocido.

Como una forma de evitar que algo así volviera a suceder, inauguró un curso electivo, el primero del que se tenga noticia titulado simplemente: “El amor”. Lo que comenzó para sus alumnos, se convirtió en un suceso mundial, porque sus estudiantes comenzaron a llegar con amigos, novios y novias, compañeros de pensión, familiares y hasta sus padres. Posteriormente comenzó a realizar un programa de la cadena PBS, que le dieron mucho más popularidad.

Sus libros sobre el amor se vendieron en todo el mundo, dejando en evidencia que de un modo u otro todos los seres humanos estamos sedientos de amor. En su libro Amor, publicado en 1972 escribió: “Vive el amor en el presente. Lo único que realmente importa es el modo en que vivimos el amor en cada momento”. Sus palabras siguen siendo vitalmente actuales.

Nunca será suficiente hacer énfasis en el amor, como el engranaje que une vidas y que revitaliza vínculos. Jesús enseñó que el amor es la base de su reino y el centro de su enseñanza. Lástima que muchas personas lo han olvidado y han construido una imagen distorsionada del amor. A amar se aprender, porque naturalmente los seres humanos tendemos hacia el egoísmo, por esa razón, desde la perspectiva bíblica el amor es un don que procede de Dios.

¿Comprendes la importancia de aprender a amar, aún cuando sea un don que procedencia divina?

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
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Comunicar


“En cambio, el que comunica mensajes proféticos edifica espiritualmente a la comunidad, y la anima y la consuela” (1 Corintios 14:3 ) 

Tim John Berners-Lee (1955)

Es prácticamente un desconocido para la mayoría de las personas que usan uno de sus inventos más geniales, por el cual el mundo contemporáneo ha tomado un giro absolutamente inesperado, el lenguaje que hizo posible Internet, la mayor red de comunicación de la tierra y la biblioteca jamás soñada por nuestros antepasados.

Tim John Berners-Lee, ingeniero y científico británico, logró en 1989 realizar la primera comunicación entre un cliente y un servidor usando el protocolo HTTP. Sabiendo la proyección que podría tener su invento, en 1994 fundó el Consorcio de la World Wide Web (W3C) con sede en el Massachusetts Institute of Technology, uno de los centros universitarios más importantes del mundo. Lo hizo para supervisar y estandarizar el desarrollo de las tecnología sobre las que se fundamenta la Web y que permiten el funcionamiento de Internet. Con el grupo de investigación con el que trabajó crearon el lenguaje HTML (HyperText Markup Language) o lenguaje de etiquetas de hipertexto, el protocolo HTTP (HyperText Transfer Protocol) y el sistema de localización de objetos en la web URL (Uniform Resource Locator).

Muchos actúan como si internet hubiera existido desde hace mucho, pero sólo fue en el año 1991 que las ideas que había desarrollado Berners-Lee pudieron llevarse a la práctica y desde ese inicio, comenzó una revolución de las comunicaciones que hace casi imposible pensar en la actualidad en un mundo sin esta red mundial de comunicación.

El W3C es dirigido conjuntamente por el Instituto Tecnológico de Massachusetts, el ERCIM francés y la Universidad de Keiō en Japón. Este organismo decidió que todos sus estándares fuesen libres, es decir, que los pudiese utilizar todo el mundo libremente sin coste alguno. Si Berners-Lee hubiese querido, hoy sería un multimillonario, pero prefirió que algo tan importante fuera gratuito.

La comparación puede ser pueril, pero Jesús hizo lo mismo, se ofreció a sí mismo gratuitamente por nosotros. No nos pidió nada a cambio.

¿Qué habría hecho Jesús con algo tan poderoso? ¿Serías capaz de entregar algo muy valioso de manera gratuita por el bien común?

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Alturas donde nadie llegó


“Eran ligeros como las gacelas sobre las montañas” (1 Crónicas 12:8). 
Edmund Percival Hillary (1919-1988)

Falleció a los 88 años de edad. Fue un alpinista y explorador neozelandés que se convirtió en leyenda el 29 de mayo de 1953, cuando realizó la primera ascensión al Everest, la montaña de 8.850 metros.

Se convirtió en héroe nacional para su natal Nueva Zelanda. Vivió la mayor parte de su vida de una manera sencilla, así lo hizo ver la primera ministra Helen Clark en su funeral cuando dijo: “Sir Ed (como se conocía a Hillary popularmente) se describía como un neozelandés cualquiera con habilidades modestas. Pero era un coloso. Fue una figura heroica que no sólo derrotó el Everest, sino que además vivió con determinación, humildad y generosidad”. No es un mal epitafio para una vida bien vivida.

Cuando escaló el Everest iba acompañado del sherpa Tenzing Norgay. En agradecimiento a su compañero, el resto de su vida se convirtió en un mecenas de la población Sherpa, ayudando a construir colegios y hospitales en los recónditos pueblos del Himalaya.

Pocos saben que la niñez de Hillary no fue fácil, todos los días caminaba dos horas hasta el colegio, tiempo que aprovechaba en leer. Fue amante de los libros desde que aprendió a leer y a los 16 años se enamoró del montañismo.

Fue además piloto y explorador, participando en 1958 en la tercera expedición que llegó por tierra al Polo Sur. También fue el alto comisionado de Nueva Zelanda para la India durante muchos años, cargo que equivale a embajador.

Le preguntaron al alpinista George Mallory (1886-1924) ¿por qué escalar el Everest? Su respuesta sencillamente fue: “Por qué está ahí”. Simple, pero efectiva. Los retos se hacen, simplemente, porque al frente hay un desafío.

Las alturas más grandes que tenemos que alcanzar no necesariamente son montañas de piedra, sin conquistar los tramos que existen para conquistar un carácter noble que trascienda y deje huella. Esa es el mayor desafío para cualquier ser humano.

Jesús escaló la montaña más alta que alguna vez algún ser humano haya escalado: Fue hasta el Gólgota, que comparado con el Everest, es la altura más alta que alguien haya llegado.

¿Estás haciendo el máximo esfuerzo? ¿Entiendes lo que Jesús hizo?

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Empatía hasta el sacrificio


“Y José dijo a sus hermanos: Yo voy a morir; mas Dios ciertamente os visitará” (Génesis 50:24 )

Etty Hillesum (1914-1943)

Etty Hillesum el 8 de marzo de 1941 comenzó a escribir un diario que mantuvo hasta el 12 de octubre de 1942. Diecisiete meses en los que se puede contemplar su transformación de una oruga en mariposa.

En 1941 en su diario reconoció que sus ideales eran “demasiado vagos, como ropa que queda un poco suelta”, y afirmó que le gustaría “desaparecer, disolverse, fusionarse armónicamente con el cielo y la tierra”. Comenzó de esa forma su búsqueda de Dios, a quien percibe dentro de sí.

La situación de los judíos empeoró. Comenzaron las persecuciones. Ella empezó a trabajar como enfermera voluntaria en el campo de Westerbork. Actuó como correo secreto de la resistencia trasladando mensajes de los prisioneros, además recogía medicinas para llevarles. Poco a poco se va solidarizando con los judíos, sus hermanos de sangre, que vivían ese horror.

Sus visitas como enfermera a los campos de concentración son contadas con todo detalle en sus diarios: “Las amenazas y el terror crecen día a día. Me cobijo en torno a la oración como un muro oscuro que ofrece reparo, me refugio en la oración como si fuera la celda de un convento; ni salgo, tan recogida, concentrada y fuerte estoy. Este retirarme en la celda cerrada de la oración, se vuelve para mí una realidad siempre más grande, y también un hecho siempre más objetivo”.

Conocidos le ofrecieron esconderla para escapar de los nazis. Etty comprendió que debía unirse a su pueblo, y se entregó voluntariamente a las SS. Ella consideraba que aún en ese abismo la vida seguía siendo significativa y bella. Escribió respecto a Dios: “Tú no nos puedes ayudar, sino que nosotros tenemos que ayudarte a Ti, y así nos ayudaremos a nosotros mismos. Lo único que podemos salvar en estos tiempos, lo único que realmente importa, es un tener una pequeña parte de Ti en nosotros, Dios mío. Nos toca a nosotros ayudarte a Ti, defendiendo hasta el final Tu casa en nosotros”.

Etty Hillesum murió el 30 de noviembre del 1943. Tenía 27 años. Desde el camión que le transportaba lanzó una postal dirigida a su amiga Christine van Nooten, que decía: “Hemos abandonado el campo cantando”.

¿Qué harías tú? ¿Qué habría hecho Jesús? ¿Por qué esta vida impresiona tanto? ¿Por qué Jesús eligió compartir nuestra suerte como humanos?

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Defender lo justo


“Él librará al indigente que pide auxilio, y al pobre que no tiene quien lo ayude” Salmo 72:12

Daisy Bates (1861-1951)

Es interesante que ayer mencionamos a otra persona con el mismo nombre y apellido, pero cuyas historias nunca se cruzaron, pero ambas se embarcaron en luchas similares por las personas menos favorecidas.

Daisy nació en Irlanda, viajó a Australia y se casó con un ganadero, cuando su esposo murió regresó a Inglaterra y estudió periodismo. Regresó a Australia en 1899 como corresponsal de The Times con el propósito de investigar acusaciones que se hacían a los colonos blancos de abusos que cometían en contra de los aborígenes.

Se terminó quedando 40 años, 30 de los cuales los pasó en una tienda de campaña en el desierto, acompañada de la soledad, las aves y los aborígenes a quienes adoptó como su propia familia. Se dedicó a estudiarlos y analizarlos como nunca nadie antes había hecho. Aprendió su idioma, sus hábitos y sus necesidades. Los aborígenes la llamaban Kabbarli (abuela). Ella se convirtió en enfermera, sanadora y defensora de los derechos de esos pueblos olvidados.

Sus viajes son legendarios. En una ocasión condujo 800 vacas atravesando 3000 millas a caballo. En otro momento, atravesó Australia en lomos de un camello para asistir a una conferencia científica en Adelaida. En el año 1933 se le otorgó la medalla de Commander of the British Empire por sus servicios de mediación entre los blancos y los aborígenes, quienes la tenían a ella como su portavoz. Escribió un libro sobre sus experiencias con ellos.

Defender al más débil no es cuestión de modas sino de principios, quienes optan por la apatía, se pierden la parte más importante de la vida: El comprometerse con ideales superiores.

Desde siempre han existido personas que actúan como si la raza, el sexo, la inteligencia o cualquier otra diferencia secundaria les diera poder por sobre otras personas. Todo aquello es ilusorio y no digno de un hijo de Dios.

Es probable que no puedas iniciar una cruzada internacional para cambiar las condiciones en las cuales viven personas que padecen, pero puedes hacer la diferencia en el lugar donde vives. Apoyar al que es discriminado te engrandecerá. Ponerte del lado del más débil te dará otra perspectiva.

¿Qué habría hecho Jesús si alguno de sus amigos fuera perseguido? ¿Qué habría dicho? ¿Qué dirás tú?

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El camino de la justicia


“En el camino de la justicia se halla la vida” Proverbios 12:28

Daisy Lee Bates (1914- 1999)

Tú y yo hemos podido estudiar sin problemas, más que eso, se nos ha exigido que entremos a un colegio porque en la mayoría de los países la educación escolar es obligatoria. Nadie nos ha discriminado por ninguna razón, simplemente nuestros padres han elegido el mejor lugar y allá nos han llevado con la seguridad que estaban haciendo lo mejor.

Lamentablemente, en la historia oscura de los Estados Unidos hubo una época en que los padres no podían elegir el colegio de sus hijos, especialmente si éstos eran de raza negra. Quienes tenían la piel oscura tenían que conformarse con ir a escuelas creadas para gente de su raza que a menudo no estaban bien dotadas de los implementos básicos, los docentes eran mal pagados y se esperaba que en ellas sólo se les enseñaran conocimientos rudimentarios, exclusivamente con el objeto que los niños y niñas de color se convirtieran en costureras, mayordomos, cocineras, mozos, etc., actividades que algunos consideraban que eran las únicas aptas para gente de raza negra.

Cuesta creer que muchos de los racistas que sostenían estos planteamientos eran fieles miembros de iglesias protestantes, que se reunían todos los domingos a orar y dar gracias a Dios. Escuchaban sermones y leían la Palabra de Dios, sin embargo, tenían una actitud soberbia, orgullosa y descalificadora para todas las personas que no eran de la raza blanca.

En ese contexto tan difícil le tocó vivir a Daisy Bates, que desde niña tuvo que sufrir los efectos de tamaña injusticia, su madre fue asesinada cuando se resistió a ser abusada por tres varones blancos. Su padre, deprimido simplemente tiempo después abandonó a su hija. Fue criada por un matrimonio amigo de la familia.

Junto a su esposo fundaron el primer períodico dirigido íntegramente por personas de raza negra en la ciudad de Little Rock, en el Sur de los EE.UU. En 1957 se hizo conocida a nivel nacional cuando apoyó y aconsejó a nueve jóvenes que intentaron inscribirse en el colegio local, reservado exclusivamente para blancos. Trabajó toda su vida por defender los derechos civiles, para que nadie fuera discriminado por ninguna razón.

¿Habría discriminado Jesús a alguna persona por el color de su piel? Cristo que tuvo entre sus a personas de diferente condición, nunca habría hecho algo así.

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No hay lugar para neutrales


“El Señor examina a justos y a malvados, y aborrece a los que aman la violencia” Salmo 11:5

Dietrich Bonhoeffer (1906–1945)

Es en medio de las crisis donde se conoce verdaderamente el carácter de las personas. Cuando todo va bien, es fácil esconderse detrás de las caretas del formalismo, la diplomacia y los estereotipos. En cambio, cuando hay momentos difíciles es preciso tomar partido, decidirse, no quedarse en la neutralidad, que es el camino de la cobardía y la pereza.

El nazismo es uno de los regímenes más sangrientos y crueles que ha existido en el siglo XX. Es probablemente el momento más difícil que ha experimentado la sociedad occidental cuando los alemanes del partido Nacional Socialista decidieron emprender su guerra expansiva basada en los criterios de la supremacía aria y los conceptos nazis de racismo y supresión de algunas etnias.

Desde siempre, muchos líderes religiosos han optado por la neutralidad, creyendo que esa es la forma correcta de actuar. Sin embargo, al observar la actuación de Jesucristo, lo menos que él fue es ser neutral. Se comprometió con la causa de los despreciados, los pobres, los marginados, y no sólo se puso a su lado, murió por ellos. Lo persiguieron porque rompió los moldes sociales de su época. El defender al pobre era una cuestión que iba en contra de los patrones religiosos, pero también políticos.

Dietrich pudo hacer como muchos pastores de su tiempo, quedarse en silencio y no decir nada. Actuar como si nada pasara y hacer de la indiferencia su forma de actuación, pero optó por el compromiso, por hacer algo, no sólo desde el púlpito sino en la acción consecuente. Fue encarcelado, luego acusado de participar en un complot para derrocar a Hitler y finalmente asesinado en la cárcel. Estando encarcelado escribió el libro El costo del discipulado, en el escribió: “Cuando Cristo llama a un hombre, le ofrece venir y morir”. Evidentemente, ser fiel a los ideales de Cristo demanda un costo.

Ser cristiano no es cuestión de liturgias, sino de compromisos que conllevan el asumir una determinada postura frente al mundo. No se puede ser un cristiano neutral. Cristo no lo fue. Es preciso tomar una posición.

Quien quiera seguir a Cristo debe saber que ser cristiano implica un riesgo no sólo de ser incomprendido, sino de ser perseguido. Jesús murió por su ideales, ¿estamos dispuestos a seguirlo? 

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Detenerse


“Un samaritano que iba de viaje llegó a donde estaba el hombre y, viéndolo, se compadeció de él. Se acercó, le curó las heridas con vino y aceite, y se las vendó. Luego ... lo llevó a un alojamiento y lo cuidó” Lucas 10:33-34.

Alberto Hurtado Cruchaga (1901–1952)

No es lo mismo nacer entre sábanas de seda que vivir en una casa de cartón. Es común que quienes nacen en la opulencia no vean con buenos ojos a quienes carecen, pero no es el caso de Alberto, hijo de una familia aristócrata de Chile.

Fue abogado, y podría haberse dedicado a esa profesión a ganar dinero sin preocuparse de nada más, no obstante, se hizo sacerdote y en dicha calidad recorrió Argentina, España y Bélgica, precisamente en este último país se doctoró en pedagogía, luego de lo cual regresó a Chile.

Por su defensa de los más pobres y los trabajadores, fue acusado injustamente de tener ideas políticas de izquierda, de hecho, los sectores más acomodados de la sociedad y algunos de su propia iglesia lo llamaban el “sacerdote rojo” o “comunista”. Lamentablemente, es la forma en que se tiende a estereotipar a quienes optan por la defensa de los más desposeídos.

Su obra más importante por la que se le conoce hasta hoy fue la fundación de la obra de beneficencia denominada Hogar de Cristo que provee de alojamiento y alimentación a indigentes.

Murió a los 51 años de cáncer al páncreas. El gobierno chileno declaró la fecha de su muerte como el “Día de la solidaridad”.

Mientras la mayoría de las personas pasa al lado de quienes padecen necesidad, hay otros que deciden hacer algo y salir de la apatía conformista del que sólo mira y no hace nada. Cuando hay necesidad se dan tres tipos de personas, los que pasan como el levita de la historia que contó Jesús, los que se detienen, miran y siguen de largo, como el sacerdote de la misma parábola o los samaritanos que dejan el sendero, hacen un alto, toman al herido, lo curan y dan una ayuda efectiva.

¿De qué tipo de persona eres? Un levita, un sacerdote o un Alberto Hurtado que se detiene y decide hacer algo en vez de hablar. Es fácil tener excusas para pasar de largo, el llamado de Jesús es a detenerse, tal como el mismo Jesús hizo. ¿Qué harás tú?

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Diferentes tipos de pobreza


“Porque nada trajimos a este mundo, y nada podemos llevarnos” 1 Timoteo 6:7

Agnes Gonxha Bojaxhiu (1910-1997)

Hay diferentes formas de pobreza. Algunas se notan a primera vista, como cuando vemos a un mendigo en la calle con ropas raídas y mal oliente, pero otras son mucho más sutiles. Quien cree que es rico sólo porque tiene dinero, posesiones, títulos o trabajos bien remunerados, es pobre, aunque no sé de cuenta. Si sólo tiene eso para vivir, su pobreza, es mayor que la de aquellos que apenas tienen para comer en el día.

Agnes, nació en un pequeño pueblo de Albania, un país europeo que durante siglos ha sido azotado por la pobreza, es probable que eso templó su carácter para darle las herramientas que la llevaron a convertirse en la Madre Teresa de Calcuta.

En el año 1929 llegó a la India para ser religiosa de una congregación que se dedicaba a la enseñanza, en 1944 fue nombrada directora de la escuela donde había trabajado por tantos años. Sin embargo, había algo que le afligía, todos los días veía a cientos de personas en las calles de Calcuta que morían en el más horrible desamparo sin que nadie hiciera nada por ellos.

Eso la llevó a tomar una decisión y fue vivir como pobre entre los pobres para llevarles el amor de Cristo a esas personas que lo necesitaban tanto. Su labor, resistida al comienzo, creció hasta convertirse en un movimiento internacional de ayuda a los necesitados. Miles de personas en diversos países han sido asistidos por las Misioneras de la Caridad que han hecho un voto de pobreza, entienden que esa es la única forma de entender con claridad lo que padecen los más necesitados.

Cristo también hizo lo mismo, se hizo pobre para vivir entre los pobres, aceptó vivir como ser humano para estar entre quienes habían perdido todo, incluso su dignidad como individuos. Jesús se comprometió con la raza humana y estuvo dispuesto a vivir entre nosotros. Es el modelo encarnacional, el ejemplo que nos presenta Jesús, que Teresa de Calcuta representó tan bien en su vida. Necesitamos menos discursos y más acciones. La religión convertida en discurso no sirve.

¿Qué ejemplo es el que enseña la experiencia de Teresa de Calcuta? ¿Qué puedes hacer en la comunidad en dónde estás? ¿Cómo puedes marcar la diferencia con tu vida?

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
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Investigar para aliviar


“Ten misericordia de mí, oh Jehová, porque estoy enfermo; sáname, oh Jehová, porque mis huesos se estremecen” (Salmo 6:2 )

Carlos Justiniano Ribeiro das Chagas (1879-1934)

Siempre la enfermedad ha sido un misterio y siempre han aparecido personas dispuestas a hacer todo lo posible para aclarar sus causas y buscar la forma de ayudar a quienes lo padecen.

Carlos Chagas fue un médico brasileño. Fue el descubridor de la enfermedad de Chagas, que lleva su nombre, también conocida como tripanosomiasis americana. Chagas ha sido el único investigador hasta ahora que ha podido describir completamente una nueva enfermedad infecciosa: su patógeno, su vector (miembros de la familia Triatominae), su hospedador, sus manifestaciones clínicas y su epidemiología.

Chagas fue pionero en atacar enfermedades infecciosas. Su primer acierto fue luchando contra la malaria, epidemia que afectaba a mucha gente. Utilizó piretro, un insecticida, para desinfectar las casas, obteniendo un éxito sorprendente. Su método que fue publicado, se convirtió en la base para la prevención de la malaria en todo el mundo.

En 1906 Chagas se unió al Instituto Oswaldo Cruz, donde continuó laborando hasta su muerte. En 1909, estando en la ciudad de Lassance, donde había ido para combatir una epidemia de malaria observó la invasión de las casas rurales por un insecto hematófago del género Triatoma que durante la noche succiona la sangre de sus víctimas. Descubrió que los intestinos de estos insectos albergaban un protozoo flagelado, una nueva especie del género Trypanosoma. Fue nominado dos veces al Premio Nobel, en 1913 y 1921.

Gracias a su trabajo miles de personas han podido encontrar alivio a sus dolencias, y de paso, Chagas enseñó la forma de explorar algunas dolencias. Su perseverancia logró lo que muchos simplemente avisoraban. Nunca se logran grandes resultados, sin esfuerzo ni tesón.

Fue lo mismo que hizo Jesús, vivió con esfuerzo y tesón y avanzó pese a las dificultades, mostrando de paso, que nada se logra sin comprometerse e involucrarse. Los que son espectadores no marcan la diferencia.

¿Quién eres? ¿Un espectador o un actor? ¿Te comprometes o simplemente miras? ¿Haces como Jesús o como aquellos que sólo se quejan?

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Sueños de servicio


“El que quiera hacerse grande entre ustedes deberá ser su servidor”. Marcos 10:43.

René Favaloro (1923-2000)

Los sueños, cuando son motivados por el ideal del servicio son imparables. No es posible detener a un soñador que tiene la motivación y el esfuerzo suficiente para salir adelante con su proyecto.

Desde muy niño René quiso ser médico, aunque nació en un barrio pobre de la ciudad de La Plata, en Argentina y aquel sueño parecía imposible para alguien de su condición social. Hijo de un ebanista y de una costurera, desde niño aprendió a valorar el esfuerzo y el trabajo digno.

Desde sus comienzos como médico aprendió que la medicina tiene que ver con el respeto y la dignidad a las personas. Ese tinte impuso en su estilo de hacer la profesión, nunca tratar con un órgano, sino con una persona.

Cuando le ofrecieron su primer trabajo como médico en un prestigioso hospital, lo rechazó porque tenía que firmar un documento declarando que apoyaba los lineamientos del gobierno en curso, con los cuales él no estaba de acuerdo. Así que pese a sus calificaciones y el prestigio que gozaba como médico que recién iniciaba su labor aceptó un puesto como médico rural.

En su condición de médico rural se compenetró de la realidad del campesino pobre y apartado, de sus desdichas, perplejidades y dolores. Aunque iba por algunos meses terminó por quedarse allí por varios años, junto a su hermano, también médico que se le sumó a la tarea.

Con el propósito de servir mejor viajó a EE.UU. y se especializó en cirugía cardiovascular. Fue el inventor de un procedimiento quirúrgico que cambió la historia de la enfermedad coronaria, eso hizo que su fama trascendiera. Motivado por enseñar lo que había aprendido regresó a su país y fundó una institución con el fin de enseñar técnicas quirúrgicas sobre el corazón y además, atender casos difíciles. Así nació la Fundación Favaloro en 1975.

Hasta el final se sacrificó por sus ideales y en un acto incomprendido por la mayoría de quienes lo conocieron muy de cerca, decidió ofrendar su vida para hacer conciencia sobre la corrupción y desidia de su país.

¿Hasta dónde estás dispuesto a seguir por tus sueños? Jesús quiso que tú y yo viviéramos felices y vino a sacrificarse por nosotros. Su sueño fue que tú y yo gozáramos la eternidad, por eso murió. Cristo, al igual que todos los soñadores, no se quedó en la mera teoría, él obró y hasta el sacrificio.

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Marcó la diferencia


“Maestro, sabemos que dices y enseñas rectamente, y que no haces acepción de persona, sino que enseñas el camino de Dios con verdad”. Lucas 20:21

Rosalind Elsie Franklin (1920–1958)

Hubo una época en que las mujeres no podían siquiera salir de sus casas sin la compañía de un varón. No podían acceder a tener cuentas bancarias, trabajos remunerados, propiedades, ni tenían derecho a votar ni a dar testimonio en un juicio. La infantilización de la mujer era cosa común y aceptada por la mayoría de la población, incluyendo muchas damas que veían en esta injusticia un estado natural “ordenado” por Dios.

Muchas mujeres han tenido duras luchas para poder ser tratadas como personas inteligentes y que pueden trabajar en condiciones similares a los varones, especialmente en áreas que se considera de exclusividad masculina.

Rosalind destacó en un campo donde sólo los varones tenían cabida, fue científica de primer orden. Se convirtió en biofísica y cristalografiadora, en otras palabras en una investigadora que analizaba la relación entre la vida y la física, y experta en la ciencia de estudiar la forma que asumen los minerales cuando se cristalizan.

Sus aportes han sido fundamentales para entender las estructuras del ADN, de los virus, el carbón y el grafito. Ella es conocida en el mundo científico por haber tomado lo que se conoce como la “fotografía 51”, la primera imagen obtenida del ADN humano mediante difracción de rayos X. Posteriormente este trabajo fue la base para que se pudiera probar la hipótesis de James Watson y Francis Crick respecto a la estructura helicoidal del ADN.

Lideró varios trabajos pioneros relacionados que estudiaron el virus del mosaico de tabaco y el virus de la polio. Falleció en 1958 a causa de bronconeumonía, carcinomatosis secundaria y cáncer de ovario, los estudios coinciden que el cáncer se debió a la constante exposición a la radiación por sus investigaciones. Ella es una de las personas a las que le debemos más de lo que sabemos. Estuvo estudiando mientras otros se dedicaban a despilfarrar su vida.

¿Qué haces hoy que puede ser un aporte para la vida de otros? ¿Podrán decir cuándo tú ya no estés que tu vida realmente fue un claro ejemplo? Cristo dejó una estela de vida que hoy seguimos porque no se conformó con ser uno más del montón, simplemente marcó la diferencia con su vida.

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
Del libro inédito: Héroes de verdad
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Sacrificio que no se explica


“Hermanos, […] les ruego que cada uno de ustedes, […] ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, santo y agradable a Dios” Romanos 12:1.


Daniel Alcides Carrión (1857-1885)

Resulta fácil ir a la farmacia y comprar un medicamento sin pensar en el costo que ha tenido el gozar de ese privilegio. Estamos acostumbrados a los beneficios de tener ayuda para nuestros problemas de salud, que en pocas ocasiones nos detenemos a pensar que en muchos casos tener un medicamento significó el sacrificio de una vida.

Cuando Daniel se graduó de médico se interesó en estudiar algunas enfermedades que causaban mucho dolor a la población, entre ellas la verruga peruana que se creía que era una dolencia endémica de Perú. La mayoría de las personas que eran infectados con dicha enfermedad morían. No había cura y no se sabía cómo actuaba su epidemiología.

En 1885, Daniel con la ayuda de un amigo, tomó una muestra de secreción de una verruga y se inoculó dicho contenido. En ese momento comenzó un calvario personal con la enfermedad. El médico llevó una anotación detallada de sus síntomas. Cada día él veía como se iba apagando su vida, sin embargo, sabía que no se podía hacer nada. Falleció el 5 de octubre de 1885. En su honor en ese día se celebra en Perú, el día de la medicina, para recordar a este joven médico que hizo un sacrificio superior para poder entender cómo obraba esta enfermedad.

Recién en 1905 el microbiólogo peruano Alberto Barton, descubrió el agente etiológico que producía la enfermedad. Tiempo después otro investigador confirmó sus hallazgos y se llamó en su honor a la bacteria como Bartonella bacilliformis. Se la conoce como Enfermedad de Carrión.

¿Qué lleva a una persona inteligente a realizar este sacrificio? Seguramente algunas personas no estarán de acuerdo con lo que hizo Daniel Carrión, pero es similar a lo que hizo Jesús por la raza humana, vino a vivir entre nosotros para entender nuestros dolores y luego murió para ayudarnos a salir de allí.

Es fácil hablar, otra cosa es actuar. Daniel, tal como Cristo decidió actuar .

¿Qué camino has elegido, el de los que hablan y no hacen nada, o de aquellos que se comprometen sin detenerse en las consecuencias? Si Cristo hubiese medido su sacrificio tú y yo no estaríamos pensando ir al cielo, ¿no crees?
Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
Del libro inédito: Héroes de verdad
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Una lámpara en la oscuridad


"Ustedes son la luz del mundo” Mateo 5:14

Florence Nightingale (1820-1910)

En tiempos de Florence se esperaba que las mujeres se mantuvieran en su hogar realizando tareas domésticas, no se les permitía estudiar en las universidades y menos trabajar en labores remuneradas.

Florence, quien desde muy niña destacó en matemáticas, un área reservada sólo a los varones, se rebeló contra ese modelo y buscó por todos los medios hacer algo diferente a lo que se esperaba para una mujer de aquella época.

Cuando descubrió su vocación decidió ser enfermera, pero dicho trabajo no contaba con ningún prestigio, al contrario, se consideraba que era una labor que debían hacer gente pobre e ignorante. No se le concedía el valor que en la actualidad tiene la enfermería.

Cuando ocurrió la guerra de Crimea, que enfrentó al Imperio ruso contra una alianza formada por el Reino Unido, Francia, el Imperio otomano y el Reino de Piamonte y Cerdeña, Florence fue enviada para ayudar. Ella llegó el 21 de octubre de 1854 acompañada por 38 voluntarias. Observó una alta tasa de mortandad entre los heridos, así que en contra de la opinión de médicos y oficiales, se dedicó a limpiar y reformar el hospital bajando la tasa de muertes de un 40% al 2%. Allí se entendió la importancia de la enfermería en los cuidados de un paciente. De esa época se la conoce como la mujer de la lámpara, porque en las noches se alumbraba así para atender a los enfermos.

Cuando regresó a Inglaterra dedicó el resto de su vida a promover la enfermería y fundó una escuela. Se convirtió en experta en estadística, aún se utilizan algunas de sus innovaciones en este campo en la medicina y otras áreas. También fue pionera en epidemiología, la rama de la medicina que estudia la manera como se transmiten virus y bacterias. En 1858 fue aceptada como la primera mujer miembro de la Statistical Society. En 1907, fue la primera mujer condecorada con la Orden del Mérito.

Ella pertenecía a la clase alta. Podría haberse quedado cómodamente en su hogar el resto de su vida, sin embargo, decidió sacrificarse al servicio de los demás. Sufrió el resto de su vida los efectos de la brucelosis, enfermedad que adquirió en Crimea. Hizo lo que hizo Jesús, no teorizó sobre el amor, vivió entre los pobres y sufrientes y se identificó con ellos.

¿Estás dispuesto a ser luz allí donde vives, consolando y apoyando en un servicio de amor tal como hizo Jesús?

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
Del libro inédito: Héroes de verdad
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