Necesidades



“Dios ha sido muy bueno conmigo, y tengo más de lo que necesito” (Génesis 33:11)

El psicólogo español Rafael Santandreu advierte sobre los deseos desmedidos que crean necesidades ficticias. Él afirma: “Tener deseos está bien, pero hemos de ir con cuidado de no convertirlos en necesidades absolutas porque el ser humano tiene ese defecto de fábrica: convierte todo el tiempo simples deseos en necesidades locas” (Santandreu, 2014:54).

Lamentablemente en el mundo en que vivimos, donde la publicidad desmedida crea necesidades ficticias, cada vez hay más gente empantanada en lo que no precisa. Si tan sólo las personas se dieran el trabajo de analizar seriamente de qué puede prescindir se daría cuenta que puede vivir con menos y no atados a necesidades ficticias.

Los seres humanos tenemos deseos, eso es normal, pero los comerciantes y la publicidad exacerban esa característica humana a su favor, provocando que muchos gasten lo que no tienen en necesidades que simplemente, son producto de su fantasía.

Suelo hacer un ejercicio cuando realizo conferencias sobre salud financiera y les pido a mis oyentes que hagan en un papel tres columnas, en una pongan todo aquello que es imprescindible y no podrían dejar (gastos fijos de agua, luz, gas), en otra una lista de alimentos que pueden prescindir que no son absolutamente necesarios, y en una tercera lista todo aquello que no es indispensable (restaurantes, cable, teléfono, objetos). Luego, les pido que hagan la cuenta y calculen cuánto se ahorrarían sólo con dejar a un lado los gastos que no son necesarios.

Estamos tan apegados a la idea de “necesidad”, cuando en realidad, no entendemos que eso nos hace esclavo de lo que no precisamos, quitándonos calidad de vida.

“La necesidad es un mal, no hay necesidad de vivir bajo el imperio de la necesidad” (Epicuro)



Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez. 
Del libro inédito: REFLEXIONES AL AMANECER


#MiguelÁngelNúñez #meditaciónmatinal #devocióndiaria
Comparte en:    Facebook Twitter Google+

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.