Se cosecha


“No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra” (Gálatas 6:7).


Siempre regresa a ti el bien o el mal que has sembrado, no puedes escaparte, es parte de la vida y asumirlo es lo que hace sabio a las personas.

Cuando el apóstol dijo que todo lo que sembramos eso segamos, no se refería a algunas cosas sino a TODO.

Cuando das amor lo recibes de vuelta con creces, pero también, cuando siembras odiosidades.

Cuando entregas tiempo, muchos te dan su tiempo en algún momento, pero si sólo das quejas y mezquindades, lo mismo, tarde o temprano recibes a cambio.

Cuando promueves tolerancia, recibes a cambio comprensión y buena voluntad, pero si lo que das es lo contrario, la gente tarde o temprano se olvida de ti.

Cuando generas empatía, otros están dispuestos a comprenderte, pero si produces indiferencia, al cabo del tiempo, es lo mismo que recibes.

La vida es como un gran ciclo, donde todo, en algún momento vuelve. Un boomerang que regresa a ti, de la misma forma en que lo has lanzado.

La próxima vez que ames, no olvides que recibirás, en algún momento lo mismo. Por esa razón, procura sembrar bondades, para que no tengas que cosechar otra cosa que no sea la paz de la equidad y la bondad.

“Si se siembra la semilla con fe y se cuida con perseverancia, sólo será cuestión de tiempo recoger sus frutos” (Thomas Carlyle).


Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013.
Del libro inédito: Reflexiones al amanecer
Comparte en:    Facebook Twitter Google+

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.