Calcular el costo


“Supongamos que alguno de ustedes quiere construir una torre. ¿Acaso no se sienta primero a calcular el costo, para ver si tiene suficiente dinero para terminarla?” (Lucas 14:28)


Lo que plantea el texto es totalmente lógico. Para construir algo es preciso sentarse y calcular el costo, para ver, tal como señala el versículo, si lo que se tiene es suficiente para acabarla. Pero hay un paso previo que el texto no menciona. Antes de ponerse a calcular los gastos es preciso haberse preguntado qué quiero hacer. Obvio, una torre de 10 pisos, con almenas y ventanas. O, una torre sólo de tres pisos, sin almenas y con dos ventanas. No se calcula sin tener idea de qué es lo que hay que calcular. El material que se necesita para una torre de 10 pisos con almenas es distinto a una de tres pisos, sin almenas y con sólo dos ventanas.

Normalmente a eso se le llamaría trazar un plan. Nosotros lo llamaremos proyecto y como estamos hablando de parejas y de vida, entonces será un proyecto de vida para la pareja.

Las parejas que no tienen idea de cuál es el proyecto de vida para su existencias no tienen idea de cuánto es lo que hay que invertir ni cuánto esfuerzo deben poner en la empresa.

Por lo demás, la perspectiva que tenga del proyecto determinará la forma en que lo encaro. Si creo que la vida en pareja es un experimento “a ver si resulta”, evidentemente, le pondré menos energía y compromiso, si concibo a la pareja como una acción “para toda la vida” que demanda de mi mejor esfuerzo.

No tener claro un proyecto de vida cuesta caro. Se invierte demás y se hacen esfuerzos inútiles. Es como si alguien se pone a construir una torre sin saber cuántos pisos tendrá, y de pronto se da cuenta que el radio es menor de lo que tenía en su mente, la única manera de avanzar es destruir lo que había construido hasta ese momento y comenzar de nuevo. O, si va en el piso 12 y se da cuenta que es muy alto y sólo desea una de 8, evidentemente perderá tiempo, energía, materiales y dinero.

La vida no debería improvisarse. La relación de pareja tampoco, es preciso trazar un proyecto de vida de otro modo, los costos son muy altos.



Copyrigh: Dr. Miguel Ángel Núñez. Del libro inédito: 
LAZOS DE AMOR

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