La base de su trono



“La rectitud y la justicia son la base de su trono” (Salmo 97:2).

Cuando era niño tenía una imagen de Dios lejana. Lo veía como un ser implacable que al primer error de uno estaba dispuesto a aplastarlo con su vara de terror. De hecho, mi madre, solía decirnos cuando algo nos pasaba: “Dios castiga, pero no a palos”. Esa idea de un Dios castigador y perseguidor, está latente y presente en las mentes de muchas personas. Sin embargo, es un mito, no es lo que la Escritura presenta.

La base del gobierno de Dios no es el terror, ni la manipulación, ni la disuación. Dios actúa en base a la rectitud y la justicia. Dos expresiones que describen a Dios de una manera maravillosa y que nunca deberíamos olvidar, especialmente, en un contexto donde la divinidad está cubierta, como dice la frase anterior, de “oscuros nubarrones”.

En la cruz Dios demostró su infinito amor, su rectitud y justicia, su bondad y su ternura, están representados en Jesús muriendo por nosotros. Nunca deberíamos olvidarnos de esa verdad extraordinaria.

Cuando en alguna ocasión, en medio del dolor, y de la aflicción, nos preguntemos: “¿Dónde está Dios?”. Mira a la cruz y observa su amor, y di a tu mente: “Allí está, muriendo por mi, haciendo un sacrificio incomprensible, para que alguna vez goce del privilegio de la salvación plena”.

El enemigo de Dios se ha propuesto desfigurar a Dios. Mostrarlo de una manera tergiversada, de tal modo que el miedo y el terror, hagan que finalmente los humanos se alejen de su bondad y de su amor.

Una vez alguien me dijo: “¿Cómo puedo creer en un Dios tan malvado que mata gente y que aterroriza niños?”. No sé en que dios crees, le contesté, porque la idea que manifiestas no tiene nada que ver con el Dios que conozco.

La pregunta es si conocemos a ese Dios de amor, de bondad y ternura que nos presenta la Biblia, o nos hemos quedado con las imágenes de terror que presentan algunos autores bíblicos influenciados por una cultura del “ojo por ojo”.

¿Has aprendido a refugiarte en el amor de Dios?

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez, 2013
Del libro inédito: Salmos de vida
Comparte en:    Facebook Twitter Google+

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.