Defensa de lo justo


“¡Librad a los débiles y pobres, y defendedlos de los malvados!” (Salmo 82:4)

Christine de Pizan (1364-1430) 

Siempre ha sido difícil vivir de lo que se escribe. Muchas personas, ingenua y absurdamente, suelen creer que escribir es una ocupación marginal, les sorprende cuando alguien puede vivir de lo que escribe, y vivir bien.

Christine de Pizan, fue una filósofa, poeta humanista y la primera escritora profesional de la historia. Vivió en una época donde las mujeres la única opción que tenían era simplemente, ser dependientes de sus maridos, y dedicarse a tareas para las que se consideraba que era lo único que servían las mujeres: Criar hijos y atender maridos.

Su padre era oficial de la corte del rey Carlos V de Francia, por esa razón, Christine tuvo la oportunidad de ser educada de manera autodidáctica con los mejores libros de la época. Aprendió Francés, Italiano y Latín. Descubrió los clásicos y el humanismo del renacimiento temprano en el archivo real que albergaba un vasto número de manuscritos, algo único para ese momento.

Tuvo un matrimonio muy feliz, pero a los 25 años quedó viuda y con tres hijos. En un contexto de necesidad se convirtió en escritora profesional, cobrando por escribir. Escribía poemas y libros por encargo. Sin embargo, se hizo famosa por escribir los primeros escritos defendiendo a la mujer, lo que se considera un antecedente del movimiento feminista posterior. Dejó de escribir a los 65 años, luego de haber escrito un libro en honor a Juana de Arco a quien consideraba una heroína por defender a la mujer.

Cuesta entender lo de la “defensa” de la mujer, especialmente a varones que nunca han tenido que defender su “hombría” o a mujeres que creen que la defensa no tiene sentido, porque están bien en una situación de subordinación y siendo secundarias en relación a sus esposos o compañeros.

Sin embargo, aún hay millones de mujeres que padecen sufrimientos indecibles sólo por su condición de mujer, basta pensar que cada año al menos 2 millones de niñas en todo el mundo sufren la oblación genital (extirpación del clítoris). Cuesta creer que en pleno siglo XXI aún se siga maltratando y humillando a millones de seres humanos sólo por ser mujeres. Dios nos creó a su imagen, tanto a varones como a mujeres, y a ambos les dio la facultad de administrar y optar desde el punto de vista ético. La defensa de esos principios sigue siendo vitalmente necesario.

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez. Del libro inedito: Héroes de verdad

#MiguelÁngelNúñez #meditaciónmatinal #devocióndiaria
Comparte en:    Facebook Twitter Google+

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.