“Y Abram era riquísimo en ganado, en plata y en oro” (Génesis 13:2)
A través de todas las edades el oro ha sido considerado como un metal precioso. Se han efectuado guerras para preservarlo y miles de conspiraciones para obtenerlo. Pero, ¿realmente es tan valioso?
Con los años el platino y otros minerales, se han convertido, por su escasez en más valiosos que el oro. La razón es simple, a mayor demanda, mayor valor, a más raro, más caro. En relación al ser humano, lo que hace que una persona sea, en términos de resultados, más valiosa que otra, es el concepto que el individuo tiene de sí mismo.
Anthony Trollope, uno de los más exitosos novelistas de la época victoriana en Inglaterra, escribió: “Nadie puede tener una opinión buena de una persona que tiene una opinión mala de sí mismo”. En otras palabras, lo que tú piensas de ti mismo condiciona lo que otros puedan pensar sobre ti. Es una especie de regla de oro de la interrelación humana. Nuestra manera de pensar de nosotros mismos condiciona lo que otros puedan pensar, así de simple, y así de complejo también.
Muchos no son exitosos simplemente, porque el valor que se dan a sí mismos está depresiado y por lo tanto, las demás personas actúan en concordancia con lo que el individuo piensa de sí mismo.
El éxito o el fracaso parte de sí mismo. Cuando Jesús invitó a amar al prójimo, hizo la salvedad “como a sí mismo”, suponiendo que toda persona sana y estable, se valora a sí misma y por lo tanto, es capaz de dar lo que tiene. En cambio, quien se desprecia a sí mismo, difícilmente podrá tener un vínculo saludable con otras personas.
Las metas, los sueños, las expetativas y todo el esfuerzo que ponemos en su realización está directamente relacionado con la actitud que tenemos en relación a nosotros mismos. Si creemos que no merecemos triunfar, no podremos hacerlo, al contrario, si pensamos en el triunfo y nos visualizamos ganadores, llegaremos a tener éxito, con más o menos esfuerzo, pero lo haremos, porque nos vemos a nosotros mismos no en la arena de los fracasados sino en la montaña de los ganadores.
Todo parte en nosotros. Dios espera que nuestra mente esté higienizada de pensamientos negativos, que vivamos el éxito que pensamos.
Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez. Del libro inédito: Superando obstáculos
#MiguelÁngelNúñez #meditaciónmatinal #devocióndiaria

0 comentarios:
Publicar un comentario
Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.