Desilusión


“Me invade una gran tristeza y me embarga un continuo dolor” (Romanos 9:2)

Mis más grandes tristezas y desilusiones han venido de amigos y hermanos cristianos. No me habría dolido tanto si hubiera sido de alguien no creyente o de un extraño. Uno no espera algunas cosas de quienes dicen amarnos o que han compartido la belleza de la gracia o la comprensión de la fe. Sin embargo, no hay forma de escapar a un dolor tan grande, cuando el que te desilusiona es un amigo que prometió acompañarte en el camino de la fe.

Sin embargo, también he tenido desilusiones producto de mi buscar permanentemente la verdad. En la búsqueda de certezas más de alguna vez me he sentido engañado al saber que lo que se me había enseñado no era correcto o que lo que creía con tanta seguridad, estaba construido sobre un entramado falso.

El psiquiatra, psicólogo y músico Claudio Naranjo lo expresa de una manera correcta al decir que “toda reflexión sincera y profunda viene, necesariamente, acompañada de desilusiones” (Naranjo, 2003: 13).

Sin embargo, pasada esa primera desilusión es posible vivir la alegría del descubrimiento y del saber. Los que nos gusta estudiar gozamos con algunas gemas de verdad como un minero cuando descubre un filón de mineral.

Sé que no hay personas perfectas ni que existen verdades absolutas al alcance humano. Les he perdonado a quienes me han fallado y ya dejé la expectativa de creer que mi certeza no tendría ninguna fisura. He aprendido a pensar que debo poner la mira en mi propio cambio.

“Si consideramos que una sociedad sana difícilmente podrá existir sin el fundamento de individuos sanos, se hace imperativo reconocer el valor político de la transformación individual” (Claudio Naranjo)

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez. Del libro inédito Reflexiones al amanecer
Comparte en:    Facebook Twitter Google+

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.