Patriarcado enfermo


“Los hijos de Dios vieron que las hijas de los seres humanos eran hermosas. Entonces tomaron como mujeres a todas las que desearon” (Génesis 6:2)

A través de casi toda la historia humana la relación varón-mujer se ha entendido en términos de jerarquía y de dominio. Los conceptos de igualdad, ayuda mutua, equidad y complementariedad de tareas, simplemente no han sido entendidas o aceptadas como lícitas, y lamentablemente, muchos de los más reacios a aceptar que mujer y varón fueron creados iguales en la Creación han sido creyentes, honestos, pero recalcitrantes en su postura de jerarquización.

Desde un comienzo, por ejemplo, la relación de Adán y Eva, no se la entendió como equitativa, sino como uno superior y otro inferior. Incluso, el concepto simbólico de ser “tomada de un costado”, fue entendido como un acto de sumisión, cuando en realidad Dios quiso expresar que ella fue tomada de un costado porque no estaba llamada ni a ser superior ni inferior, sino a estar a su lado en términos de equidad e igualdad.

Génesis 1:27 plantea la idea de una relación de varón y mujer en términos igualitarios. Ambos creados a imagen de Dios y sin ningún tipo de jerarquización ni sometimiento.

Cuando la cultura, machista, sexista y androcéntrica impone su agenda de discriminación y entiende la Biblia a partir de esas premisas, entonces, no es mucho lo que se puede hacer, simplemente, la historia se tergiversa a favor de una cultura de la discriminación, lamentablemente, mediante esa visión distorsionada se lee e interpreta la Escritura, torciendo su verdadero sentido.

La mujer, fue creada por Dios, bajo las mismas condiciones del varón. Bendecida y con los mismos deberes ético/morales. Suponer que creó al varón superior para someter a la mujer, es no sólo torcer la Escritura, sino además, creer que Dios por definición es injusto, pro-machista y discriminador, algo que evidentemente no es.

Dios no escribió la Biblia, la inspiró. Quienes escribieron algunos tristes pasajes como el que encabeza esta reflexión fueron varones que dejaron de entender y hacer la voluntad divina.

Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez
Del libro inédito: Ser mujer no es pecado


#MiguelÁngelNúñez #Meditacióndiaria #Devocional
Comparte en:    Facebook Twitter Google+

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.