La misión


“Cuando vio a las multitudes, subió a la ladera de una montaña y se sentó. Sus discípulos se le acercaron, y tomando él la palabra, comenzó a enseñarles” (Mateo 5:1-2)


La misión de Cristo estaba centrada en la enseñanza. Entendía que las multitudes eran como “ovejas sin pastor” (Mateo 9:39), y sabía bien que sin dirección y guía, podrían fácilmente convertirse en víctimas de manipuladores y abusivos, que usarían su influencia y carisma para llevarlas por caminos inciertos y peligrosos.

Han pasado cientos de años desde que Jesús estuvo en esta tierra, y lamentablemente, el modelo de enseñanza de Cristo se ha convertido en simplemente “predicación”, “sermones” y “homilías”, donde pastores y sacerdotes, se conforman con dar mensajes de oratoria convencidos que es su única tarea, “sermonear al pueblo”.

Jesús eligió un camino diferente: Enseñar.

Cuando se procura enseñar, hay intencionalidad, propósito, deseo expreso de que quienes están en una situación de ignorancia aprendan. Cristo, el Maestro más extraordinario que alguna vez ha caminado por esta tierra, se entregó completamente a la enseñanza.

Por esa razón está mal aplicado y pésimamente entendido el señalar que este párrafo de Cristo corresponde a un “sermón”, dado en la montaña. Son un resumen de las enseñanzas que Jesús dió a la multitud y que los escritores bíblicos preservaron para la posteridad porque entendieron que habían asistido a la clase más extraordinaria del mundo.

Si los que guían congregaciones o lideran a otros cristianos, no entienden que su misión es enseñar, así como Cristo lo hizo, entonces estarán perdiendo la esencia del pastorado.

Cristo fue “maestro, educador y artesano de la personalidad” (Augusto Cury)



Copyright: Dr. Miguel Ángel Núñez. 
Del libro inédito: 
REFLEXIONES AL AMANECER

#MiguelÁngelNúñez #meditaciónmatinal #devocióndiaria

Comparte en:    Facebook Twitter Google+

0 comentarios:

Publicar un comentario

Tus comentarios enriquecen este blog, y a las personas que lo leen. Te agradezco por tus aportes. Sin embargo, ten en cuenta que para que se publique lo que comentas debes indicar tu nombre (no se publicará ningún mensaje anónimo), y no debe aparecer ningún enlace a alguna página, número de teléfono, o dirección. Además, no se publicará ningún comentario con tinte ofensivo, homofóbico, discriminatorio, insultante o irrespetuoso. Todo lo demás, es bienvenido.